En Jujutsu Kaisen, el enfrentamiento entre Satoru Gojo y Kenjaku va más allá de un simple duelo entre héroe y villano. Ambos, aunque enemigos acérrimos, comparten una visión oculta: transformar la sociedad de hechiceros. Este trasfondo revela que las líneas entre el bien y el mal no son tan claras como parecen.
Kenjaku: el visionario de un nuevo orden
Kenjaku no es un villano común, sino un arquitecto que busca retornar a la “era dorada” de los hechiceros, una época donde la libertad para experimentar y explorar no tenía restricciones. Cree que el sistema actual ha sofocado la verdadera esencia de la hechicería, enclaustrando a los hechiceros bajo reglas que limitan su potencial. Su visión es radical: un mundo sin barreras impuestas por los clanes. Para él, las tradiciones son el verdadero enemigo.
Con esta idea, Kenjaku ha cometido actos brutales, como el asesinato de Riko Amanai, una pieza clave en su plan para controlar la hechicería. También organizó el despiadado Culling Game, una prueba mortal destinada a seleccionar a los hechiceros más fuertes, aquellos capaces de sobrevivir en su visión de un nuevo orden. En su mente, estos sacrificios son necesarios para liberar a la hechicería de las ataduras que la sofocan.
Gojo: el progresista que quiere cambiar las reglas
A diferencia de Kenjaku, Satoru Gojo desea una evolución en la hechicería, pero sin la destrucción completa del sistema. Como uno de los hechiceros más poderosos y carismáticos, Gojo representa la esperanza de una sociedad más justa y flexible. En su visión, los hechiceros deben adaptarse a los nuevos tiempos, dejando atrás tradiciones que ya no sirven a la humanidad.
Gojo critica abiertamente a los clanes y a la dirección de Jujutsu High, instituciones que, según él, solo buscan preservar su poder a costa del desarrollo de los jóvenes hechiceros. Su misión no es solo proteger a la humanidad, sino empoderar a la nueva generación para que transformen el sistema desde adentro, creando un ambiente donde sus habilidades puedan florecer sin restricciones.
Gojo y Kenjaku: dos caminos hacia un mismo objetivo
Aunque Gojo y Kenjaku están en bandos opuestos, ambos desean una sociedad de hechiceros libre del control opresivo de los clanes. Mientras Gojo ve la evolución como una forma de empoderar a los hechiceros, Kenjaku busca una revolución destructiva donde solo los más fuertes prevalezcan. El choque de sus visiones plantea una pregunta: ¿quién logrará cambiar el destino de la hechicería?
La rivalidad entre Gojo y Kenjaku es más que un enfrentamiento entre bien y mal; es la lucha por el control de un futuro incierto, donde sus similitudes resultan aún más inquietantes que sus diferencias. Ambos desean un cambio profundo, aunque sus caminos estén marcados por la destrucción y la renovación.
Aún me asombra que el plan de Kenjaku para sellar a Gojo dependia completamente de su relación con Geto
— Lalo idk 🌌 (@Lalooidk) September 21, 2023
Ni 10, ni 100, ni 1000 personas serían suficientes para distraer a Satoru Gojo, pero solo una persona puede congelar su mundo por completo#JujutsuKaisen pic.twitter.com/bBXBJ5irD8