Lejos de lo que muchos creen, las grabaciones de los mejores y más populares sitcoms estadounidenses no son puro entretenimiento. También están repletas de momentos incómodos y molestos. Lisa Kudrow, intérprete de la ocurrente rubia de Friends, sacó a la luz una de las cosas que más le irritaba durante los rodajes.
Kudrow no solo se metió en la piel de Phoebe Buffay por más de 236 episodios, sino que también apareció en varias escenas como su hermana gemela Úrsula. Su fama creció a lo largo y ancho de América y el mundo entero, en especial por el estilo hippie de su personaje, junto a una guitarra maltrecha y la icónica canción «Smelly Cat».
Aunque su papel de ficción modelaba un carácter despreocupado, Kudrow está muy lejos de ser indiferente a su alrededor. De hecho, solía disgustarse a menudo con su público en directo.
Hacer reír demasiado también es molesto
No es un asunto de ego ni mucho menos de creerse la mejor humorista. Todo lo contrario, Kudrow sufría cada vez que la audiencia en vivo reía demasiado durante los sketches. En el podcast Conan O’Brien Needs a Friend, admitió que los invitados a los rodajes reían demasiado y que eso no era divertido.
Para Lisa, que los presentes demostraran tanta euforia con escenas sencillas era un error que perjudicaba el timing del resto de la serie. Robaba espacio de otros diálogos y hacía forzoso continuar. Incluso, confesó que regañaba al público cuando tenían reacciones exageradas.
La actriz detalló que una serie de televisión es para los espectadores en casa y debe tener una dinámica y ritmo muy distintos al teatro. Cuando el elenco está siendo grabado no puede solo esperar que terminen las carcajadas; deben reanudar el show sin que los presentes interrumpan o desconcentren.
Friends tuvo otros problemas de rodaje por la audiencia en vivo
Para el resto del reparto también parecía una penosa tarea cuando las escenas debían repetirse y los chistes empezaban a trillarse. Claro está, ya el público no reía con espontaneidad. En cambio, para Kudrow no suponía ningún problema y hasta lo agradecía. Fue ella quien propuso grabar las risas iniciales y ponerlas en las tomas definitivas.
Lisa no solo guarda en su memoria los momentos irritantes. Pese a lo estricto de un día de grabación que podía durar entre seis y ocho horas, recuerda muy bien todo lo que la producción de tan exitosa serie le permitió vivir.
La ganadora del Emmy mencionó en la misma entrevista lo fascinante que fue grabar la escena de todo el equipo junto a la fuente y el tema de cabecera I’ll be there for you. Incluso, contó que tras la muerte de Matthew Perry, suele ver maratones de Friends para recordarlo.