Monstruos’ es la nueva serie antológica de Netflix sobre los hermanos Menéndez. El caso de parricidio de Lyle y Erik ha tenido bastante éxito en la plataforma streaming pero también ha generado extrema controversia por su ficción acusadora. Lo que la familia protagonista considera un ‘relato deshonesto’ proveniente de una mala intención de su creador Ryan Murphy.
“Con el corazón apesadumbrado debo decir, creo que Ryan Murphy no puede ser tan ingenuo e inexacto sobre los hechos de nuestras vidas como para hacer esto sin mala intención”
apeló Erik Menéndez sobre el programa.
Esta producción se estrenó el pasado 19 de septiembre en la gran N roja y no tardó en causar revuelo, principalmente en los autores del crimen que residen en una prisión al sur de California cumpliendo cadena perpetua desde 1996.
¿Quiénes eran los hermanos Menéndez?
Este oscuro capítulo en la historia de Estados Unidos cuenta cómo dos jóvenes privilegiados de 18 y 22 años dispararon a sus padres José y Mary ‘Kitty’ Menéndez hasta matarlos. Los cuerpos policiales cumplieron meses en investigaciones, mientras los herederos se dedicaron a gastar la fortuna de su padre y ejecutivo del entretenimiento en autos lujosos y otras inversiones comerciales.
No fue hasta 1993 que ambos comparecieron ante la justicia y confesaron su implicación en el homicidio, aunque desde entonces sostienen que fue en defensa propia. Los hermanos Menéndez aseguran que fueron víctimas de múltiples abusos físicos, psicológicos y sexuales a manos de sus progenitores. Este último argumento fue poco validado por la institución judicial que los arrestó sin libertad condicional, aunque en 2023 un viejo integrante de la banda Menundo denunció al antiguo ejecutivo José Menéndez por abuso sexual durante su niñez.
Opinión de Ryan Murphy
El productor y guionista estadounidense respondió con prontitud a la crítica de su programa y aseguró que trabajó a detalle cada elemento contado en la pantalla chica. El también responsable de Monsters Dahmer defendió que el 65% del guion se centra en los abusos que Lyle y Erik afirman haber vivido.
“Creo que es interesante que haya emitido un comunicado sin haber visto el programa. Es realmente difícil, si es tu vida, verla en la pantalla”.
Murphy justificó su trabajo audiovisual en una amplia investigación previa sobre los hechos y todos los puntos de vista de los involucrados en el suceso, incluso la teoría de relación incestuosa de los asesinos presentada por Dominick Dunne. La filmación es una recopilación de las experiencias de Lyle y Erick Menéndez y las razones por las que cometieron el crimen, así como su posterior consecuencia.
Incongruencias de adaptación
Tanto en la vida real como en la ficción se exponen los testimonios de los familiares y, aunque es cierto que gastaron mucho dinero posterior al crimen, sus allegados confiesan que siempre hacían las mismas opulentas compras. Esto deja sin efecto la hipótesis de un homicidio por codicia.
La serie también relata que los hermanos fueron arrestados en celdas contiguas, cosa totalmente errónea ya que fueron separados en distintos centros penitenciarios y no se vieron hasta pasados 22 años, según informa New York Daily News.
