Miles de personas fueron evacuadas por las precipitaciones en el estado Río Grande, al sur de Brasil, tras un fuerte ciclón que cobró la vida de 13 víctimas.
Brasil protagonizó una nueva tragedia climática después de que las lluvias continuas y los fuertes vientos golpearan la zona costera. Decenas de municipios del estado Río Grande se vieron afectados por las precipitaciones.
Eduardo Leite, gobernador de Río Grande do Sul, señaló que continúan los operativos de búsqueda para localizar a personas que se encuentren aisladas y alejadas de sus familias. Leite, junto al equipo de rescate, recorrió en helicóptero las zonas que sufrieron más pérdidas para evaluar el nivel de los daños y, sobre todo, intentar salvar a la mayor cantidad de damnificados.
«Nuestro principal objetivo en este primer momento es proteger y salvar vidas humanas. Rescatar a las personas que están aisladas, localizar desaparecidos y dar apoyo a las familias»,
comentó Leite.
Cuerpos policiales y bomberos rescataron a más de 2.400 personas en los últimos dos días. Militares del ejército también se sumaron a las labores de rescate. No obstante, las bajas temperaturas y la continuidad de las lluvias empeoran la situación de los afectados. Muchos de ellos tienen el tiempo en su contra.
El presidente de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva también se pronunció al respecto. El mandatario expresó su solidaridad con las familias afectadas y catalogó la situación como «muy grave». Además, reiteró que «el gobierno seguirá actuando en todos los frentes para garantizar la seguridad de la población».
Daños por ciclón en Brasil
En total, se calcularon 4.913 víctimas que perdieron sus casas, de las cuales 797 fueron evacuadas de emergencia por estar en zona de riesgo. Alrededor de 84.000 hogares permanecieron sin electricidad por el ciclón en Brasil.
Sao Leopoldo fue una de las ciudades que más padeció los estragos de las lluvias. Las precipitaciones continuaron durante 18 horas seguidas entre jueves y viernes.
Dentro de las víctimas que perdieron la vida destaca un bebé de 4 meses, encontrado en Sao Sebastiao do Cai. Esta zona estaba aislada por el ciclón, por lo que el niño no recibió la atención médica a tiempo. Además, para el sábado había más de 20 desaparecidos en Caraá; una ciudad de 8.000 habitantes. No obstante, gracias a los operativos de búsqueda ese número disminuyó a 3, según las autoridades.
“El agua ya llegaba a la cintura en la casa. Gracias a Dios los bomberos llegaron rápido y nos socorrieron en barco. Parecía una pesadilla»,
mencionó una de las víctimas.
Zonas de riesgo
Expertos señalaron que los efectos devastadores que se vivieron en estos municipios son una consecuencia de la urbanización descontrolada. La sobrepoblación en estas ciudades y la gran cantidad de viviendas en zonas de riesgo están expuestas constantemente a inundaciones y deslizamientos.
Alrededor de 9.5 millones de personas habitan en estas localidades, por lo que se exponen a sufrir constantes daños, sobre todo, en la temporada de lluvia. Durante este ciclón se produjeron vientos de más de 80 km/h y cayeron más de 600ml de agua en 24 horas, mucho más que lo estimado por las autoridades.