Delle es un delfín mular solitario que habita en el Mar Báltico, un hecho inusual dado su naturaleza social. Sus vocalizaciones podrían revelar cómo enfrenta su aislamiento.
Un visitante inesperado en el Mar Báltico
En 2019, un delfín nariz de botella, al que los lugareños llamaron Delle, apareció en el canal Svendborgsund en Dinamarca. Este delfín ha estado solo durante los últimos cinco años, lo cual es sorprendente, ya que los delfines mulares generalmente viven en manadas, apoyándose en la comunicación y el trabajo en equipo para cazar y sobrevivir. Delle, sin embargo, ha encontrado una manera única de lidiar con su soledad: «hablando consigo mismo».
La sorprendente conversación de Delle
Un estudio reciente realizado por la Universidad del Sur de Dinamarca reveló que Delle ha emitido más de 10,000 sonidos en un período de 69 días, incluyendo silbidos, pulsos explosivos y tonos de baja frecuencia. Estas emisiones sugieren una intensa necesidad de interacción social, que los delfines usualmente satisfacen a través de su complejo sistema de comunicación.
Los investigadores, liderados por Olga Filatova, instalaron grabadoras submarinas para estudiar la comunicación de Delle. Descubrieron que el delfín emitía tres silbidos distintivos, cada uno funcionado como una especie de «nombre». Aunque normalmente los delfines usan estos sonidos para identificarse entre sí, en el caso de Delle, podrían ser un intento de mantener una forma de interacción en ausencia de congéneres.
Aunque las razones exactas detrás de estas vocalizaciones siguen siendo inciertas, los expertos proponen que podrían estar ligadas a emociones o necesidades psicológicas no satisfechas. Otros delfines solitarios también han mostrado patrones vocales similares, lo que sugiere que esta podría ser una respuesta común al aislamiento.
El misterio detrás de la soledad de Delle y la naturaleza de un delfín
La soledad no parece tener el mismo efecto en todos los delfines. Mientras que algunos, como Delle, pueden recrearse con sus propias vocalizaciones, otros pueden volverse más disruptivos. Se han registrado incidentes en Japón de un delfín solitario mordiendo a bañistas, aparentemente para llamar la atención.
La mayor incógnita es por qué Delle fue dejado solo. ¿Fue excluido de su manada o simplemente se perdió durante sus travesías? La respuesta a estas preguntas permanece como un enigma, pero su situación destaca la importancia de la comunicación y el contacto social entre estas criaturas altamente inteligentes.
Delle, el delfín que habla consigo mismo, sigue siendo un caso fascinante para los científicos, ya que ofrece una ventana única para entender el comportamiento social y las adaptaciones al aislamiento en la vida marina.