En un nuevo estudio realizado por la Universidad de California, se le solicito a 500 personas que conversaran con tres modelos de IA diferentes: GPT-3.5, ELIZA y GPT-4.
Tras pasar unos cinco minutos de esta interacción, debían estar en capacidad de determinar si estaban hablando con una persona real o con una IA.
Los resultados fueron reveladores: el 50% identificó correctamente a GPT-3.5 como una IA y el 22% creyó que ELIZA era un ser humano. Pero, un increíble 54% de los participantes pensaban que GPT-4 era una persona de carne y hueso.
Este experimento innovador nos demuestra la enorme capacidad de GPT-4 para imitar conversaciones humanas de manera muy convincente.
Repercusiones en la economía y la sociedad de GPT-4
Los investigadores advirtieron sobre las posibles y factibles consecuencias de la cada vez más convincente capacidad de las IAs para imitar actitudes humanas.
Estas tecnologías podrían llegar a generar problemas graves en el ámbito económico. Podrían generar desconfianza en las interacciones virtuales, que cada vez son más necesarias en un mundo globalizado.
A medida que las nuevas IAs se vuelvan más sofisticadas e “inteligentes”, existe la gran preocupación de que se llegue a un punto en que las personas puedan tener dificultades para distinguir entre máquinas y humanos.
¿Verdadera Inteligencia o es solo imitación?
Para profundizar en este asunto, se han realizado más estudios con expertos de amplia experiencia en el área de la tecnología.
Ellos argumentan que, aunque el GPT-4 ha demostrado una capacidad de verdad impresionante para imitar el lenguaje humano, esto no equivale a ser una verdadera inteligencia.
Este modelo está basado enteramente en patrones y data previa. Es decir, en datos que ya son existentes. Su enorme capacidad para poder dar respuestas lógicas con ese nivel de consistencia se debe a la enorme cantidad de información con la que se ha entrenado. Pero, no a una comprensión real o un entendimiento de estos temas, es decir no hay una interpretación de nada en sus propias palabras, no pueden “crear nada
comentaron.
La inteligencia artificial aún está lejos de alcanzar una comprensión y conciencia similares a las humanas.
Sin embargo, se hace hincapié en que la capacidad de la IA en imitar a los humanos. Es un logro que demuestra que estamos en el camino correcto para crear sistemas que pueden interactuar de manera más natural y efectiva.
La IA GPT-4 ha superado el test de Turing, ¿pero es realmente inteligente o solo una imitadora talentosa? 🧠 #InteligenciaArtificial #TestDeTuringhttps://t.co/da0GKg7ha6
— Tutores Académicos (@TutorAcademico) July 4, 2024