No juegues a esto si no quieres frustrarte: Cuphead vs. Dark Souls

Los videojuegos están diseñados para ser experiencias interactivas que presentan desafíos acorde al estilo o género del juego. A menudo, enseñan a los jugadores a identificar patrones, resolver rompecabezas o desarrollar estrategias para superar niveles y adversarios más difíciles.

Sin embargo, algunos juegos no solo son más difíciles de lo que parecen, sino que también pueden ser tan castigadores que parecen casi imposibles de superar. Dos ejemplos perfectos de esto son Dark Souls de FromSoftware y Cuphead de Studio MDHR.

La Dificultad de Cuphead: Ritmo Rápido y Pocos Recursos

Cuphead es un homenaje a los dibujos animados de las décadas de 1930 y 1940, como Felix the Cat y Mickey Mouse. En el juego, Cuphead debe capturar las almas de varios contratos para salvar la suya propia.

Los jugadores solo pueden recibir tres golpes antes de que ocurra un game over. Con pocos recursos a su disposición, los jefes lanzan todo tipo de ataques al jugador simultáneamente. La combinación de música caótica, animación retro y obstáculos requiere de pensamiento rápido y buena puntería.

La popularidad de Cuphead llevó a la producción de un programa en Netflix llamado The Cuphead Show! en 2022. Los niveles de Cuphead varían en estilo: niveles de correr y disparar, batallas tradicionales de jefes y combates aéreos. Esta variedad mantiene el juego atractivo pero desafiante, ya que los jugadores deben adaptarse a diferentes mecánicas.

La determinación en Dark Souls: enemigos implacables y aislamiento

Dark Souls cuenta su historia a través de su mundo y objetos, con jugadores controlando al No-Muerto Elegido, quien puede resucitar tras cada muerte. Similar a Cuphead, el No-Muerto Elegido debe recolectar almas para alcanzar su objetivo final.

Dark Souls es gótico y desolador, creando una sensación de total aislamiento. Los jugadores enfrentan múltiples jefes para obtener las Almas de los Señores de seres antiguos. Cada enemigo, desde los más pequeños hasta los jefes más grandes, puede matar al jugador, obligándolos a recuperar las almas perdidas mientras arriesgan morir nuevamente.

El multijugador complica la dificultad en ambos juegos

Ambos juegos ofrecen opciones multijugador, aunque la de Dark Souls es más complicada. En Cuphead, un segundo jugador controla a Mugman, aumentando la salud de los jefes pero permitiendo resurrecciones. Sin embargo, esto puede ser una distracción. En Dark Souls, los jugadores pueden ser invadidos por otros, complicando el progreso en lugar de ayudar.

Cuphead es Más Difícil que Dark Souls

Mientras que Dark Souls es difícil por buenas razones, Cuphead demuestra que el verdadero castigo proviene de los errores más pequeños. En Dark Souls, los jugadores pueden recoger donde dejaron y curarse durante las batallas. En Cuphead, no hay opción de curación, y los errores pequeños resultan en un reinicio inmediato.

Aunque el multijugador puede ayudar en ambos juegos, no es consistentemente útil. La dificultad de Cuphead radica en la necesidad de mantener un ritmo alto y minimizar errores para lograr la victoria.